Ingrid Beauchamp

Ingrid Beauchamp
Información Biográfica
Nombre completo	Ingrid Beauchamp
Edad	31
Ocupación	Bibliotecaria/Curadora
Estado	Viva (renacida/resucitada)
Nacimiento	1982
Deceso	2013
Causa de Muerte	Estrangulamiento
Residencia	East Haven
Información Física
Género	Femenino
Cabello	Castaño
Ojos	Marrones
Información Familiar
Familia	Victor Beauchamp (padre) † Joanna Beauchamp (madre) Freya Beauchamp (hermana) Frederick Beauchamp (hermano) † Wendy Beauchamp (tía) Helena (tía) Nikolaus (abuelo) † Hijo Nonato
Información Sobrenatural
Especie	Bruja
Procedencia	Asgard
Títulos	La Llave
Maldición	Reencarnación
Poderes	Lanzamiento de Hechizos Elaboración de Pociones Mediumnidad Telekinesis Sanación Atmokinesis Apertura de Portales
Información Adicional
Medio	Witches of East End (Serie de Televisión)
1ra. Aparición	Piloto
Ult. Aparición	For Whom the Spell Tolls
Interprete	Rachel Boston

"No soy tan buena como crees y si fuera tú me largaría de la ciudad. No me molestes más. Soy bruja, ¿recuerdas?"

―Ingrid Beauchamp.

Ingrid Beauchamp es uno de los personajes principales de la serie sobrenatural de Lifetime, Las Brujas de East End, emitida desde octubre de 2013 hasta octubre del 2014. Ingrid es interpretada por la actriz Rachel Boston y se basa en el personaje homónimo de la serie de libros “La Familia Beauchamp”, creados por la autora Melissa de la Cruz.

Ingrid es la hija mayor de los brujos Victor y Joanna Beauchamp, hermana de los gemelos Freya y Frederick, sobrina de Wendy y Helena, y nieta del gobernante de Asgard, el rey Nikolaus.

Descripción Física

Ingrid Beauchamp es una atractiva mujer de poco más de 31 años de edad. Es alta y delgada, su piel blanca es naturalmente bronceada, su cabello es castaño y largo, por lo general lo lleva suelto y ondulado, tiene grandes ojos marrones, nariz un poco chata, y un lunar notable sobre el lado superior derecho de sus labios. Ingrid posee una belleza algo conservadora, y aunque su hermana es usualmente considerada la más hermosa, aquellos que posan sus ojos en Ingrid tienden a notar su belleza.

Su maquillaje y vestimenta son bastante reservados, y a menos que deba arreglarse para algún evento importante, su maquillaje siempre es ligero y apenas visible. Su armario está repleto de prendas conservadoras, suéteres de algodón, faldas largas, vestidos veraniegos y camisas que encaja con sus faldas de tubo. Su color predilecto parece ser el blanco, pero a lo largo de la serie se le ha visto con colores fuertes y prendas decoradas con estampados florales.

Personalidad

"Soy una escéptica racional y seré una excepción."

―Ingrid a su madre.

Ingrid es una mujer algo tímida, bastante inteligente y con un sentido del humor bastante peculiar, que en más de una ocasión la ha metido en situaciones incomodas. Aunque socialmente es funcional, Ingrid es una persona bastante reservada y a menudo tiende a alejarse del resto del mundo ─en su juventud, Ingrid pasaba la mayor parte del tiempo encerrada en su habitación, privándose de cualquier posibilidad de una vida social─, sólo con aquellas personas cercanas a ella, como su familia, o las pocas personas que puede considerar sus amigos, es que Ingrid puede abrirse y desenvolverse con total frescura, mostrándoles la verdadera Ingrid que no muchos pueden ver.

Ingrid destaca por su inteligencia y su hambre voraz de conocimiento la ha hecho una amante de los libros, tanto, que a pesar de tener muchos estudios y una licenciatura, optó por dedicarse a acomodar estantes y prestar ayuda con textos en la biblioteca pública del pueblo. El intelecto de Ingrid ha influenciado mucho en varios aspectos de su personalidad; ella es alguien que precisa de evidencia y datos antes de saltar a cualquier conclusión o creer en algo de manera ciega, por esa razón es que a menudo tiene a cuestionar las cosas, como cuando desestimaba por los dones latentes de su hermana y los actos mágicos que ella misma realizaba.

Naturalmente pasiva, Ingrid ha demostrado a muchos en más de una ocasión que puede ser determinada, terca y valiente, siendo capaz de enfrentar amenazas por sí sola con tal de conseguir un bien mayor; por lo general para proteger su secreto o defenderse a sí misma o a su familia.

Biografía

Vidas Pasadas

Asgard - 1613

"¡Ero Regina!"

―Ingrid en estado de embriaguez.

Más de cuatrocientos años atrás, en el místico reino de Asgard, nació producto del amor entre la princesa Joanna y su marido Victor, una niña a la que decidieron llamar Ingrid. Criada entre lujos y convencida de que algún día heredaría el trono tras la muerte (o destronamiento) del rey, Ingrid adoptó una personalidad un tanto prepotente y a la vez despreocupada ─de acuerdo con su hermano menor, Frederick, Ingrid proclamó estando bebida, “¡Ero Regina!”, latín para “¡Seré reina!”─.

La vida en Asgard era buena y pacífica, pero todo cambió para peor cuando su abuelo, el rey Nikolaus, se vio corrompido por la maldad de la Serpens Clavem, un poderoso objeto capaz de abrir y sellar los portales que dividen los dos mundos (el de lo divino y el mortal). Decididas a ponerle fin al reinado del patriarca, la familia Beauchamp y muchos otros asgardianos se unieron para derrotar a Nikolaus, pero fue en vano, ya que su ejército era más grande y sus aliados inesperados; el plan de las Beauchamp habría funcionado de no ser porque Frederick, su propio hijo y hermano les dio la espalda y juró lealtad al rey. Al enterarse de la traición, el rey Nikolaus decidió desterrarlos de Asgard y se vengó de sus mujeres alterando su inmortalidad, condenando a Wendy a tener las nueve vidas de un gato, y a Joanna a vivir eternamente sólo para ver nacer y morir jóvenes a Ingrid y a Freya una y otra vez. Confiado de su victoria tras haber sentenciado a su familia a una eternidad de miseria en el mundo mortal, el rey intentó regresar a su mundo con la serpiente y su nieto, pero en un último acto de valentía, las mujeres de su familia lograron arrebatarle la llave y cerrar con ella el portal, separando no sólo los dos mundos, sino también a la familia real.

Salem ─ 1693

"Lo siento, pero tus hijas no controlaban sus poderes. Había que hacer algo para conservar nuestro secreto."

―Vidar justificando su acto.

Poco después de haber sido maldecida por su abuelo, Ingrid murió y reencarnó unas dos veces más, pero de todas estas reencarnaciones tempranas la que más relevancia e información se tiene es de aquella nacida en algún momento entre 1660 y 1670, en Salem, Massachussets. En esta vida, Ingrid vivió en esta pequeña aldea puritana junto a sus padres y su hermana menor, Freya.

Los Beauchamp vivieron en armonía entre los mortales, aparentando ser igual de ordinarios que ellos, pero ocultando sus dones, ya que en un lugar tan creyente como lo era Salem, la brujería podía ser penada con la muerte. A pesar del peligro subyacente, Joanna nunca le impidió a sus hijas utilizar su magia, e incluso las instruía a temprana edad para que perfeccionaran sus talentos mágicos (Ingrid parecía talentosa con la magia elemental, ya que pudo hacer crecer un tallo de flor en un tronco muerto en medio del gélido invierno).

Ingrid y su hermana ocultaron lo que eran por un tiempo, pero a medida que crecían se volvían más imprudentes y su magia fluía cada vez más libre, esto causó que un viejo amigo de la familia y notable hechicero llamado Vidar, entregara a las hermanas Beauchamp a los aldeanos deseosos de quemar a las brujas que supuestamente atormentaban el pueblo. La traición de Vidar no fue bien vista por Joanna, incluso cuando intentó justificar que fue por un bien mayor. Enojada y adolorida, Joanna vengó la muerte de sus hijas cortándole una oreja al hechicero, quién debió considerarse afortunado teniendo en cuenta que Joanna se contuvo de hacerle algo peor.

Ingrid reencarnó al poco tiempo de su deceso en 1693, y se cree que murió a principios del siglo XVIII después de que Freya entrara en contacto con Ramus Mortium.

Baltimore ─ 1848

"Si Freya muere yo también moriré, pero naceré de nuevo."

―Ingrid a su madre.

Esta encarnación de Ingrid renació en Baltimore en los años 20 del siglo XIX y murió en algún momento del año 1848. Ingrid nació en un hogar roto y en un ambiente de dudosa moral; su padre había abandonado a su familia años atrás y su madre lidió con su ausencia enviciándose en el opio y descuidando a su familia y el negocio que había cofundado con su hermana, Wendy. El negocio familiar era un burdel y fumadero de opio en el que Ingrid y Freya tenían un pequeño negocio donde ofrecían a los residentes de la ciudad predicciones de su futuro por medio de cartomancia y suerte y protección con sencillos encantamientos.

La vida de Ingrid y su familia, aunque complicada debido a recientes eventos, estaba destinada a verse azotada por la tragedia. Su hermana menor, cegada por el amor que sentía por el poeta y escritor Edgar Allan Poe, decidió revelarle su secreto y ayudarle con su sequía creativa invocando a los espíritus; tal hazaña hizo que el espíritu de un asesino en serie llamado Ambrose Bancroft poseyera su cuerpo y utilizara sus poderes para estrangular a varias mujeres en Baltimore. Cuando Ingrid se enteró de lo que estaba pasando ofreció su ayuda para detener al espíritu maligno, pero su tía rechazó cualquier ayuda y decidió enfrentar a Ambrose sola, lo cual fue un grave error, ya que al tener los poderes de Freya, éste la mató.

Ingrid y Joanna consiguen la caja.

Al descubrir el cuerpo sin vida de Wendy, Ingrid no tuvo otro remedio más que pedir ayuda a su madre, que se encontraba rendida en una habitación del burdel bajo los efectos del opio. En un principio, Joanna no creyó la historia que le estaba contando Ingrid, pero tras ser convencida, reveló que ella no podía hacer nada por Freya, pero conocía a alguien que sí. Este alguien era un misterioso hechicero que trajo consigo una peculiar caja llamada “Anima Aucupe”, un recipiente encantado capaz de absorber almas y enviarlas al infierno, el único inconveniente era que no sólo el espíritu maligno sería destruido, sino que el alma del cuerpo anfitrión, también.

Al principio, Joanna rechazó la idea de matar a Freya, ya que sabía las consecuencias de tal decisión, pero Ingrid sí estaba dispuesta a hacerlo; ella sabía que si utilizaban la caja Freya moriría y por ende ella también, pero también sabía que gracias a su maldición, la muerte para ellas significaba otra oportunidad de vivir. Ingrid convenció a su madre de utilizar la Anima Aucupe, pero no sin antes hacerle prometer que cambiaría su estilo de vida, ya que al reencarnar, ella y Freya la iban a necesitar más que nunca.

Ingrid ve a la Joanna del futuro.

Armadas con la caja en sus manos, Ingrid y Joanna se dirigieron al bosque a media noche para destruir al espíritu maligno. Para atraerlo, las Beauchamp cantaron un cántico que lo hizo deambular directo hacia ellas; allí, Joanna intentó “despertar” el espíritu de Freya, pero fue inútil, ya que Ambrose se había apoderado de ella por completo. Sin ninguna otra opción más que la inicial, Joanna abrió la caja enfrente del cuerpo de Freya y absorbió ambas almas, enviando los dos espíritus al infierno y el cuerpo de Freya tirado en el piso. Ingrid y Joanna velaron el cuerpo de su adorada hija y hermana, hasta que fueron sorprendidas por una figura familiar que les pedía la caja que habían utilizado previamente. En ese momento Ingrid pensó que se trataba de un impostor quien les pedía la caja, pero su propia madre reconoció a la solicitante como su yo del futuro y por alguna razón parecía saber de su llegada y también de su urgencia.

East Haven ─ 1906

"Mírame a los ojos. Tu sabes quien soy. Soy Ingrid"

―Ingrid a Joanna.

Nacida en 1876 y asesinada en 1906. Esta vida de Ingrid nació en East Haven, Long Island, mejor conocido como el East End. Aquí, Ingrid trabajaba en el negocio familiar, un famoso boticario recurrido por aquellos con enfermedades y molestias que sabían que podían contar con los remedios milagrosos de las Beauchamp. Ingrid aparentaba ser una joven sumisa y conservadora, pero debajo de esa fachada, existía una mujer aventura, lujuriosa y de espíritu libre, que solo podía ser ella misma cuando estaba con el hombre que amaba: Archibald Browning, un adinerado hombre de negocios con una reputación dudosa en la sociedad. Archibald era igual que Ingrid, ambos eran brujos y odiaban tener que ocultar lo que eran y lo que sentían el uno por el otro. El único lugar donde podían expresar su amor y utilizar su magia con libertad era en Fair Haven, una enorme mansión recién construida por Archibald para llevar a cabo sus orgías y rituales satánicos, los cuales eran cada vez menos un secreto y se volvían la comidilla de todo el pueblo.

Ingrid y Archibald practican magia.

Los rumores recorrieron East End, algunos juzgaban y despreciaban las practicas que se llevaban a cabo en Fair Haven, mientras que otros se veían intrigados y atraídos por todo aquello que escuchaban, como fue el caso de Elizabeth, una mujer anciana que juntó sus ahorros y se los dio a Archibald y a Ingrid para que lanzaran un hechizo sobre ella que le regresara su juventud. Ambos aceptaron el acuerdo y realizaron el hechizo, el cual funcionó por unos minutos, pero luego causó la muerte de la mujer. Esta tragedia representaba un inconveniente para Archibald y su aquelarre, ya que debían huir antes de que alguien se enterara. Por desgracia, ese alguien fue William, el hermano de Elizabeth, quien sospechaba de las andanzas de Browning y amenazó con exponerlo ante todos. Con la intención de poner a prueba su lealtad, Archibald le pidió a Ingrid que matara al hombre, pero tras ver el tiempo que le tomaba decidir, decidió hacerlo el mismo, rompiéndole el cuello a William con sus poderes.

Ingrid cae a su muerte.

Conscientes de las consecuencias que traerían sus actos, Ingrid y Archibald planearon huir de East Haven para pronto casarse y empezar una nueva vida sin ocultar sus poderes, pero sus planes se vieron truncados cuando Wendy descubrió lo que tenían pensado hacer. Ella intentó convencer a su sobrina de que era una mala idea, pero Ingrid no escuchó, estaba cegada por amor. Cuando Archibald llegó al boticario donde estaban Wendy e Ingrid, este se enfureció la mujer y utilizó sus poderes en su contra, lo cual provocó una reacción previsible y comprensible; Wendy recurrió a su magia para detenerlo, conjuró una bola de metal entre sus manos y la lanzó contra Archibald, pero su puntería falló y la bola fue en dirección a la pequeña hija del hechicero, Athena, quien habría resultado lastimada de no ser por el gesto heroico de Ingrid, quien se interpuso en medio y cayó a su muerte desde el barandal del segundo piso.

La muerte de Ingrid marcó un antes y un después en la vida de todos. Joanna presintió el destino de su hija y corrió al lugar donde encontró su cuerpo tirado en el piso. La tristeza de Joanna y enojo con Wendy no se comparaban en nada a la furia de Archibald, quien intentó asesinar a Wendy, pero fue detenido por Joanna cuando está le clavó un cuchillo en la espalda que lo convirtió en cenizas, justo enfrente de todos, incluida su hija. Puede que Joanna haya perdonado la vida de su hermana, pero eso no significaba que había perdonado su acción; en un acto desmesurado, Joanna desterró a su hermana de sus vidas, igual que lo había hecho más de un siglo atrás con su marido, y lanzó varios hechizos: uno sobre Athena para hacerla olvidar lo ocurrido, y uno sobre East End para que ni la niña, ni ningún otro brujo pudiera encontrar el pueblo jamás.

Vida Actual

"De pequeñas les hice un hechizo para que no descubrieran lo que somos. Apenas funcionó con Freya, pero contigo sí."

―Joanna le revela la verdad a Ingrid.

Nacida en el recóndito pueblo de East End en Long Island, Ingrid Beauchamp fue criada por una mortal común y corriente por su madre Joanna, una maestra de arte de espíritu libre, que había mantenido oculto un gran secreto durante casi treinta años: que son brujas. De pequeñas, Joanna les había lanzado un hechizo para suprimir sus poderes y tratar de impedir el ciclo de dolor que había estado repitiéndose desde el momento en que el rey les lanzó la maldición.

Ignorante de su verdadera naturaleza y pasado mágico, Ingrid inició una nueva vida como una reservada archivista en la biblioteca pública del pueblo, donde encontraba confort en los viejos libros y sus dos buenos amigos, Hudson y Tabitha.

Ingrid vivió la mayor parte de su vida siendo incrédula de la magia, hasta que una sucesión de extraños eventos le abrieron los ojos a su realidad: ella era una bruja, una que había vivido y muerto decenas de veces debido a una maldición, y ahora que sus poderes habían sido desatados, corría riesgo de sucumbir a su fatídico destino.

Historia

• Primera Temporada
• Segunda Temporada
• Almas Cruzadas

En el Piloto, vemos a Ingrid apurando a Freya para ir a su fiesta de compromiso, pero su hermana no se encuentra de ánimo para celebrar, ya que se está inquieta por un sueño que ha estado teniendo con un hombre al que nunca ha conocido. Ingrid intenta convencerla de que son los nervios por la pronta boda lo que están causando estos sueños, pero Freya no está del todo convencida, ya que según ella, tiene poderes psíquicos y que su sueño puede estar diciéndole algo, a lo que Ingrid responde irónicamente que su único “poder” son sus pechos.

Luego de que su hermana se alistara y su madre las sorprendiera en la entrada de la puerta para felicitar a su hija, las tres mujeres asistieron a la fiesta, donde Freya fue felicitada por todos, Joanna conversó con su futuro yerno, e Ingrid se encuentra con Adam, un apuesto detective bastante interesado en ella. Ambos inician una incómoda conversación en la que Ingrid habla sobre los rituales satánicos que tuvieron lugar a principios del siglo pasado en Fair Haven, la mansión donde se llevaba a cabo la celebración, y también le hace saber a Adam que siente mucho su ruptura con su antigua novia, Emma, a quien ella tilda de no muy lista, y para su sorpresa, él da a entender que sólo salió con ella después de que Ingrid rechazara su invitación. Antes de que pudieran llevar la conversación más a fondo, son interrumpidos por el timbre del celular de Adam, que recibe una llamada informándole sobre un asesinato ocurrido minutos antes en Melrose Park, y se solicitaba su pronta asistencia.

Después de haber sido dejada sola, Ingrid comenzó a deambular por los pasillos de Fair Haven, admirando sus viejas pinturas hasta que entró en una habitación donde descubrió una fotografía antigua en la que aparecía una mujer idéntica a ella junto a otra con extraño colgante y cada una sosteniendo una escoba. Ingrid se sorprendió por el parecido de la mujer en la foto, pero mientras la inspeccionaba, el marco se rompió y la fotografía se desintegró en sus manos.

A la mañana siguiente, Ingrid está en la cocina con su madre, leyendo el periódico y relatando en voz alta ─para el horror de Joanna─ cada uno de los sórdidos detalles del ataque de la noche anterior que le costó la vida a su vecino Bill Thatcher y dejó a su mujer, Maura, en estado de coma. Cuando hermana baja a la cocina por una taza de café, Ingrid y Joanna notan que se ve pensativa y nerviosa y le hacen preguntas e insinuaciones de su posible dilema; Ingrid menciona que la razón por la que se está apresurando con el casamiento es porque no sabe qué hacer con su vida y Joanna pone en duda que Freya pueda soportar los continuos viajes filantrópicos de Dash, lo que hace que Freya abandone la cocina ofendida, ya que piensa que su madre cree que lo va a engañar.

En la biblioteca, Ingrid ve a su mejor amiga, Barb, afligida por algo y tras preguntarle, descubre que el último tratamiento in vitro de la pareja ha fracasado y que él médico dijo que necesitarían algo más que un milagro para poder concebir, y sin ninguna intención más que una súplica desesperada, Barb le pregunta a Ingrid si conoce algún conjuro de fertilidad, ya que ella había estudiado brujería, pero Ingrid destruye sus ilusiones cuando le dice que ella estudió la historia de la brujería, no su práctica, y que si existiera tal cosa, ella sería la primera persona a la que ayudaría.

Más tarde ese mismo día, un inesperado visitante llega a la biblioteca en busca de Ingrid; es Adam Noble, quien vino a disculparse por su ruda despedida en la fiesta, pero Ingrid no siente que debe hacerlo, ya que al ser policía debía atender al llamado. Adam cambia la conversación rápidamente y saca unas fotografías con las que espera Ingrid pueda ayudarle; las fotos muestran la escena del crimen de los Thatcher y en la arena hay un símbolo que Ingrid cree conocer, pero que le tomará algo de tiempo identificar, Adam accede a dejarle las fotografías y le dice que deberían discutir lo que haya descubierto con una taza de café, e Ingrid acepta con total disposición. Después de que Adam abandona la biblioteca, Ingrid le ofrece a sus amigos hacer algo divertido; hacer un hechizo al cerrar la biblioteca para ayudar a Tabitha a quedar en embarazo. Barb se emociona con la idea y Hudson acepta con la condición de hacer sombreros.

Tras finalizar su turno, los tres amigos se reunieron en un pasillo de la biblioteca y dibujaron un pentagrama en el suelo, después se pusieron los sombreros que había insistido Hudson en hacer y recitaron un conjuro en latín que Ingrid había descargado de Internet. El hechizo no hizo ningún efecto visible y los tres decidieron irse a un bar, al dejar la biblioteca, el pentagrama que había dibujado Ingrid comenzó a brillar, indicando que el hechizo pareció funcionar.

En la mañana, Ingrid y su hermana descubren por boca de su madre que su tía Wendy ─la hermana de Joanna que creían era invento de su madre para asustarlas cada vez que peleaban─ estaba de visita en la casa y se encontraba arriba en el desván. Mientras Joanna les hablaba sobre Wendy, un gato negro brincó sobre la mesa donde desayunaban, espantando a las chicas, Joanna se enfureció con el felino, el cual dijo que era de su hermana y lo reprendió, amenazando con castrarlo y llevándolo fuera de la cocina. Cuando quedaron solas en la habitación, Freya le mencionó a su hermana si creía en las almas gemelas y ésta, en su habitual tono sarcástico respondió que no, pero de inmediato supo que la pregunta de su hermana era por algo serio y ese algo no podía ser nadie más que su prometido, Dash. Freya no se resiste y le cuenta a su hermana lo ocurrido la noche anterior con el hermano menor de Dash, Killian, a quien describe como un torrente de pasión y sexo desenfrenado en comparación con su hermano seguro y confiable. Ingrid se escandaliza con la confesión de Freya, pero antes de poder decir algo son interrumpidas por su madre, quien les presenta a la famosa tía Wendy. Freya la recibe con los brazos abiertos, pero Ingrid corre despavorida, ya que se impactó al ver que su tía era la misma mujer del extraño colgante que aparecía en la foto que encontró en Fair Haven.

En la biblioteca, Ingrid se encuentra trabajando con unos libros cuando es sorprendida por Barb, quien no puede contener la emoción y le revela las buenas nuevas noticias: está embarazada. Ingrid queda perpleja y más porque Barb le atribuye a ella ese milagro; según ella, después de tener relaciones con su marido (dos veces) tuvo un sueño en el que Ingrid le entregaba a su bebé y al contarle eso, insinuó que Ingrid era una verdadera bruja con verdaderos poderes. Las palabras de Barb dejaron a Ingrid sorprendida y a la vez aterrada, tanto que salió inmediatamente de la biblioteca dejando a su amiga sola.

Al llegar a su casa, las cosas se volvieron más extrañas para Ingrid; su madre estaba junto a su tía, quien yacía tirada en el piso tras haber sido apuñalada por quién decía ser una impostora. Cuando Ingrid preguntó que estaba ocurriendo su madre no la puso al tanto de la situación presente, pero sí le reveló un secreto que desde hacía horas Ingrid estaba sospechando: son brujas. Al comienzo, Ingrid no quiso creerle, pero las evidencias eran demasiadas. De acuerdo con su madre, ella había colocado un pequeño hechizo sobre ellas para que no recordaran lo que son, en ella funcionó a la perfección, pero en Freya no tanto, y ahora que el secreto había salido a la luz y sus poderes habían sido liberados, estaban en gran peligro, en especial su hermana, que necesitaba ser salvada de un antiguo enemigo que planeaba asesinarla y evitar que esta vez reencarnara. Ingrid estaba atónita por toda la situación, y antes de que ella y su madre pudieran hacer algo, el timbre de la puerta sonó; era Adam Noble, el detective había llegado junto a otro oficial para arrestar a Joanna, quien estaba siendo acusada por Maura Thatcher del asesinato de su marido, Bill. Antes de ser llevada a la comisaría por los agentes, Joanna susurró en el oído de Ingrid que el mueble en el comedor tiene un fondo falso y que allí encontraría algo que la podrá ayudar.

En el capítulo Marilyn Fenwick, R.I.P, Ingrid hace lo que su madre le ordena y encuentra en el fondo del mueble un gran baúl sellado, el cual logra abrir al decir “ábrete”, después de haber intentado otras maneras que creía serían más efectivas. En el baúl encontró varias fotografías suyas y de su hermana que databan de décadas y siglos atrás, documentos antiguos y un libro mágico que llamó de inmediato su atención. Ella comenzó a hojear el grimorio en busca de un hechizo que pudiera ayudar a su hermana, pero en cambio se topó con uno que podría traer a su tía Wendy de vuelta de entre los muertos.

Con el hechizo adecuado en sus manos, Ingrid regresó a la cocina donde estaba el cuerpo sin vida de su tía, lo movió hasta la sala, donde había dibujado un pentagrama con sal y pétalos de rosas y recitó el conjuro que la regresó de vuelta a la vida. Para sorpresa de Ingrid, Wendy no tomó muy bien el hecho de que la haya resucitado, ya que sus poderes la traerían de regreso por sí sola, pero su enfado no era para nada con Ingrid, sino con Joanna, ya que, de haberle enseñado a sus hijas a utilizar sus poderes, sabrían las consecuencias del hechizo que Ingrid había realizado; si resucitas a alguien que quieres, alguien que quieres deberá morir. Wendy cambia de inmediato el tema y le pregunta a Ingrid si han salvado a Freya, pero enseguida responde que no, ya que Joanna ha sido arrestada por asesinato. Al escuchar que las cosas han empeorado desde su deceso, Wendy le dice a Ingrid que necesitará su ayuda para salvar a Freya antes de que sea demasiado tarde.

Ingrid y Wendy salen de la casa y se dirigen al Bent Elbow, el bar donde trabaja Freya. En el camino, Ingrid le hace preguntas a su tía, ¿quién quiere lastimar a Freya, y por qué? Wendy no duda en responder y lo cuenta todo; un antiguo amante de Freya ha regresado por venganza, y este amante proviene de otra vida, una de las tantas que ambas han tenido y que no pueden recordar debido a una maldición puesta sobre todas las mujeres de la familia. Ingrid intenta que su tía le explique más, pero ella se rehúsa y le dice que su madre deberá hacerlo en otro momento, su prioridad ahora era salvar a su hermana.

Las dos llegan lo más pronto posible al bar y entran directamente al baño de mujeres, que estaba lleno del humo que emanaba de la pintura en llamas donde creían estaba Freya. Allí, Wendy comenzó a sentir los efectos secundarios del hechizo que la había resucitado, enfermándose y perdiendo el control de su habilidad metamórfica, regresando a su forma gatuna en el peor momento posible. Pero antes de convertirse en un gato, le advierte que deberá lanzar el hechizo que le había enseñado en el camino por sí sola. Asustada, Ingrid comienza a recitar el encantamiento esperando haber llegado a tiempo y salvar a Freya, pero no fue necesario ya que Freya había logrado escapar de la pintura antes de que llegaran al bar. Ingrid le pregunta cómo logró escapar y Freya se sorprende de que su hermana supiera lo que ella creía había sido un sueño. Ingrid de inmediato le dice que no lo fue, y antes de explicarle algo a su confundida hermana, toma al gato y a su hermana por el brazo y parten para ayudar a su madre, quien se encuentra en un embrollo con la ley. Al salir del baño, Ingrid se va creyendo que el hechizo que había lanzado fue en vano ya que su hermana había salido por su propia cuenta, pero no imaginó que el hechizo sí había sido efectivo, el único problema era que había ayudado a escapar a la persona equivocada; a Doug, el hechicero que había atrapado a Freya en la pintura en primer lugar.

De regreso en el auto, Freya comienza a hacerle preguntas a Ingrid sobre su nuevo descubrimiento, y ella le responde lo poco que sabe; que son brujas, que su madre les ocultó ese secreto, que han vivido y muerto al menos una docena de veces y no lo recuerdan porque están malditas, que su madre ha sido arrestada por asesinato y que el gato que tenían en el asiento trasero no era la mascota de la tía Wendy, sino la tía Wendy. La primera reacción se Freya es enojarse por los secretismos de su madre, pero eso rápidamente pasa a un segundo plano cuando su tía aparece nuevamente en su forma humana en el asiento de atrás. Wendy le explica a Freya que el verdadero responsable del crimen es un brujo que ha tomado la forma de su madre y procede a explicarle los tipos de brujas que hay y los poderes que cada una posee. Mientras lo hace, Ingrid recibe una llamada de Harrison Welles, el abogado inmortal de su madre, dándole un mensaje de su madre, diciéndole que necesita pagar una fianza de 100.000 dólares, y que el dinero lo pueden encontrar con la tía Marilyn. Ninguna de las chicas entiende a que se refiere su madre, ya que la tía Marilyn estaba muerta, e iban a su tumba cada año desde que eran unas niñas. Wendy enseguida capta de que se trata todo el asunto de la tía, y le dice a sus sobrinas que van a necesitar palas.

Con palas en mano, las Beauchamp comienzan a cavar la tumba de la supuesta tía Marilyn, la cual había sido un invento de su madre para ocultar el dinero que había ido acumulando a lo largo de los años y que en caso de que algún día lo necesitara para alguna emergencia, sus hijas supieran de su ubicación exacta. Mientras cavaban, Wendy les comenta a sus sobrinas lo feliz que está porque este tipo de aventuras le recordaba a sus vidas pasadas, cuando su magia no era un secreto y se encontraban metidas en todo tipo de líos sobrenaturales. Ingrid y Freya por otro lado no piensan igual, Freya está molesta con su madre por haberle ocultado lo que ella siempre sospechó, mientras que Ingrid, deseaba que su madre hubiese mantenido el secreto, ya que prefería seguir siendo una tímida bibliotecaria con una vida mundana y ordinaria. Mientras hablaban de su magia y sus vidas pasadas, Freya le pregunta a su tía como eran antes, y ella le dice a Freya que siempre había sido igual, excepto por Ingrid, que antes era aventurera, poderosa y confiada, algo que había perdido en esta vida debido a la manera en que había sido criada. Intenta convencerla de que ser una bruja no es tan malo, que aunque tenga sus contras es principalmente un don, pero Ingrid se rehúsa a hacerle caso e insiste en que su magia es una maldición y le recuerda que todas ellas están literalmente malditas. Wendy trata de hacerla cambiar de parecer, pero la conversación llega a su fin cuando la pala de Freya golpea el ataúd que habían estado desenterrando. Wendy les da unas palancas para abrirlo, y al hacerlo descubren cientos de fajos de billetes rellenando el cajón. Las chicas olvidan sus problemas por un segundo mientras juegan con el dinero, tirándolo en el aire como gesto de celebración, ignorando que en ese mismo momento estaban siendo espiadas por el enemigo que les estaba causando todos estos problemas.

Tras pagar la fianza, Joanna regresa a casa con su familia, y allí es confrontada por Freya por todo aquello que les había ocultado y cómo le había hecho creer que había malo con ella por haber sabido la verdad durante todo ese tiempo. Freya intenta hacerle ver lo horrible de sus acciones, pero Joanna no lo acepta, intenta explicarle por qué lo hizo, ─para evitarles a ella y a Ingrid el sufrimiento que habían padecido a lo largo de sus otras vidas por ser lo que son─ pero Freya no escucha razones y se va de la casa.

Cuando Ingrid queda sola con el grimorio familiar, comienza a buscar un hechizo que pueda revertir su error mágico y así evitar que alguien que quiera muera, ─se da cuenta de que a más personas de las que pensaba─ pero su tía la descubre y le dice que no hay nada que pueda hacer, que la muerte de esa persona puede ocurrir dentro de unas semanas o un año y que sólo había que esperar, además, le pidió que no le dijera del hechizo a su madre ya que ésta tenía suficientes preocupaciones con todo lo que estaba pasando. Ingrid resiente su nueva situación y le dice entre llantos que desearía no ser una bruja, que quisiera volver a su vida aburrida y normal. Wendy la consuela y mientras lo hace aparece su madre, a quien engañan diciéndole que sólo lloraba por su nueva verdad. Ingrid trata de restarle importancia al asunto diciendo que ahora todo lo veía diferente, incluido el cuadro de un desierto que colgaba en la pared del comedor. Joanna le dice que el cuadro es diferente porque Doug ya no se encontraba dentro de ella. El recordar que Doug había salido de la pintura, hizo que Joanna le preguntara a Ingrid y a Wendy lo que había pasado con la fotografía del bar; ellas le dicen que fue destruida al quemarse, pero Joanna no está tan segura de que el hechicero haya sido derrotado tan fácil, ya que sí logró escapar de una pintura una vez, era muy probable que lo volviera a hacer. Para salir de cualquier duda, Joanna sale nuevamente de la casa con Ingrid y Wendy rumbo al bar, y así asegurarse de que Doug haya permanecido adentro.

Joanna va con Ingrid y Wendy al bar y descubren que Doug ha escapado. Su madre comienza a llamar a Freya y ésta no responde, pero decide que lo mejor es regresar a casa. Por desgracia, nadie de su familia estaba allí, a excepción de Doug, que la emboscó para intentar matarla en la bañera con un hechizo congelador.

Las Beauchamp logran llegar a la casa a tiempo y descubren a Doug tratando de matar a Freya. Joanna lo confronta en una pelea física y con la ayuda de su hermana logra atraparlo nuevamente en una pintura con un hechizo. Mientras su madre y su tía confrontan a Doug, Ingrid se apresura a la bañera donde estaba el cuerpo inconsciente de Freya y la saca del agua, evitando así que su maniaco ex novio llevara a cabo su plan.

Temprano por la mañana ese mismo día, las Beauchamp regresan a la tumba de la tía Marilyn para enterrar la pintura en la que encerraron a Doug. Ingrid le pregunta a su madre por qué no la queman, y ella le dice que de hacerlo el hechicero moriría, y ellas no mataban, o al menos ya no más.

Después de enterrar el cuatro, Ingrid vuelve a la casa, y una vez más comienza a leer el grimorio en busca de una solución, incluso si horas antes le había prometido a su tía que dejaría que las cosas tomaran su rumbo natural.

En Today I Am a Witch, Ingrid despierta de un extraño sueño en el que descubre a Wendy leyendo las cartas del tarot sobre una mesa a la medianoche, según ella, porque las cartas prefieren ser leídas en horas nocturnas. Cuando Ingrid le pregunta por qué las está leyendo, Wendy le dice que está tratando de averiguar quién morirá por culpa de su hechizo. Ingrid le dice que si no recuerda que ella le dijo que no había forma de saberlo, pero Wendy, de manera despreocupada, le responde que no debería creer todo lo que ella le dice. Cuando Wendy termina de repartir las cartas sobre la mesa, se sorprende ante lo que estas han mostrado ─la capa, la muerte, la sacerdotisa, el hombre colgado, el loco─ Ingrid comienza a preguntarle quien será la víctima de su hechizo, si su madre, su hermana o su propia tía, pero Wendy le dice que no, que la persona que morirá va a ser ella misma. Al escuchar eso, Ingrid baja la mirada y ve como sus brazos empiezan a congelarse, le pide ayuda a su tía, pero ella se la niega, diciéndole que se merece lo que estaba pasando, ya que ella era la responsable de todo en primer lugar.

Habiendo tenido el sueño espantado por la pesadilla, Ingrid baja en horas de la madrugada a la cocina y encuentra a Wendy leyendo el Grimorio en busca de algún hechizo que la ayude con el problema de la impostora. Wendy de inmediato nota que el insomnio de su sobrina es porque está preocupada por las consecuencias del hechizo, e Ingrid le pregunta si hay algún hechizo que puedan utilizar para prevenir la situación. Wendy le dice que no, que el equilibrio debe ser restablecido, y que en cambio debería dejarla enseñarle a usar sus poderes, los cuales hasta ahora habían sido desastrosos, pero que con practica y esmero, podrían ser místicos y preciosos. Para demostrarlo, agita una mano en el aire y hace desaparecer el techo para revelar un precioso cielo estrellado con una luna llena.

Mientras miraban al techo el maravilloso de Wendy, Freya aparece en la casa quejándose de haber tenido sexo con Killian ─en un sueño, claro está─ y le pregunta a su tía por qué es tan difícil controlar sus sueños, a lo que Ingrid y Wendy respondo en unísono que simplemente lo es. Aprovechando que sus dos sobrinas están liadas con sus nuevos poderes, Wendy ofrece su ayuda para enseñarles a controlarlos, bajo la condición que no se lo dijeran a su madre, quien quiere mantenerlas alejadas lo máximo de la magia. En ese momento baja Joanna y le dice a Wendy que no quiere que sus hijas utilicen magia porque es muy peligroso. Ingrid le dice que tal vez si usan magia pueden ayudarla a combatir al cambiaformas, y Joanna le dice que no será necesario, que ya se ha encargado del asunto con un hechizo de destierro y que no precisarán más de la magia, por lo que lanza el Grimorio al fuego y lo destruye, según ella, para no tentar a la suerte.

Por la mañana, a escondidas de Joanna, Wendy llevó a Ingrid y a Freya a practicar magia en un hermoso lago, pero antes de poner a prueba sus poderes, Wendy les explica cuáles son sus talentos naturales; Freya puede crear pociones de amor y sentir los deseos del corazón, mientras que las habilidades de Ingrid provienen de su intelecto, la creación ─de acuerdo con Wendy, verla crear un hechizo es como ver a Mozart componer un concierto─, pero eso fue en otras vidas, en esta son completas novatas que necesitan aprender a defenderse y a controlar sus poderes lo más pronto posible. Para ponerlas a prueba, Wendy lanza una piedra y la deja flotando sobre el lago para que sus sobrinas la muevan con la mente; Freya falla estrepitosamente al hundirla en su primer intento, e Ingrid falla al vaciar el lago entero, haciendo volar peces y plantas marinas en su dirección.

En la biblioteca, Ingrid se encuentra leyendo unos libros de brujería, esperando encontrar una forma de romper la maldición que había desatado su hechizo de resurrección, cuando es sorprendida por el detective Adam Noble, quien viene a proponerle directamente salir con él en una cita, ya que las veces anteriores en las que ha dado indicios de querer algo con ella, ella siempre ha rechazado sus avances. Como siempre, Ingrid intenta evitar la cena con Adam debido a posibles conflictos con la policía dado que él es el encargado de llevar el caso por homicidio en el que está involucrada su madre. Afortunadamente, Adam revela que ha sido apartado del caso debido a su relación amistosa con Ingrid, y le confiesa (una vez más) que le gusta. Ingrid parece sentir lo mismo y entre risas y nerviosismo, acepta salir con él.

Más tarde ese mismo día, Ingrid y Adam se encuentran en su cita en el Bent Elbow, y de un momento a otro sale a flote el tema del arresto de Joanna. En un principio, Ingrid lo toma con frescura ya que confía plenamente en la inocencia su madre, pero Adam no lo cree así, y le dice que se prepare para un posible arresto, ya que Maura afirma haber visto a Joanna asesinar a su marido delante de ella. El humor en la mesa cambia inmediatamente, e Ingrid se disculpa con Adam y se retira del bar, diciéndole que le encantó la cena, pero que necesita tomar un poco de aire fresco.

Al poco tiempo, Ingrid regresa al bar y conversa con su tía Wendy, que está un poco pasada de copas y herida por la discusión que había tenido poco antes con su hermana. De manera discreta, Ingrid logra cambiar el tema y le menciona a su tía que ha encontrado un hechizo en un libro y que cree poder modificarlo para evitar la muerte de un ser querido. Wendy enseguida le prohíbe hacer cualquier modificación o hechizo sin su supervisión, ya que, a pesar de tener el don de crear nuevos encantamientos, en esta vida es sólo una novicia y que el más mínimo error podría resultar fatal. Wendy le hace prometer a Ingrid que no intentará nada de lo que tenía pensado hacer, e Ingrid le promete sin credibilidad alguna que se abstendrá de modificar el embrujo que había encontrado.

Ignorando las palabras de su tía, Ingrid decide ir a la biblioteca y realizar el hechizo que había mencionado anteriormente. De inmediato parece tener problemas con la traducción del conjuro, y escoge una palabra latina para ataduras, simplemente porque le parece que suena bien. Una vez termina la modificación, procede a ejecutar el hechizo en medio de un pentagrama y varias velas, pero el conjuro no tiene el efecto deseado, por el contrario, parece intentar cobrar la vida de ella congelando sus manos y gran parte de los brazos; el hechizo probablemente pudo haber congelado su cuerpo entero de no haber sido por la pronta asistencia mágica de Wendy, quien apareció en la biblioteca recitando un poderoso hechizo repelente y sanador después de intuir que su testaruda sobrina no le haría caso.

Poco después de haber sido salvada y descongelada, Ingrid fue reprendida por su tía, quien la regañó por haber intentado tal hazaña tras haber descubierto de la magia hace tan solo unas semanas, pero también comprendió porque lo había hecho, y le reiteró una vez que no había nada que pudiera hacer para frenar la maldición, ya que lo que debe pasar pasará y que no debe vivir su vida preocupándose por ello. En ese momento, Adam aparece por sorpresa en la biblioteca después de haber visto su auto estacionado afuera. Wendy aprovecha su llegada y se despide, dejándolos a solas entre libros. Adam aprovecha para disculparse por su comportamiento en la cena, diciendo que debió haberse quedado callado y no poner en duda la inocencia de su madre, pero minimiza su disculpa puesto que no le ha dado mucha importancia y, además, al final de cuentas él tenía razón, su madre estaba siendo acusada de asesinato y no sabían cómo acabarían las cosas. Ingrid intentó destruir cualquier posibilidad de romance con Adam porque creía que su vida era demasiado complicada en ese momento, y que probablemente lo suyo hubiera funcionado si le hubiesen dado una oportunidad tiempo atrás, y al igual que con la disculpa de Adam, sus escusas son ignoradas, y él le dice que está dispuesto a estar con ella sin importar nada, ya que eso es lo que ha querido desde hacía mucho tiempo. Ingrid se conmueve tanto por sus palabras que lo silencia con un beso a mitad de ellas.

De regreso en casa, Ingrid se entera del ataque que su madre sufrió a manos de la impostora y le pregunta como se encuentra; Joanna le dice que se encuentra bien y le dice a ella y a su hermana que ha decidido permitirles seguir usando sus poderes, ya que no hay razón para que oculten lo que son y siempre han sido: brujas. Además, necesita de su ayuda para enfrentarse a esta nueva amenaza, la cual no es la primera y muy probablemente no será la última que asedie a la familia. Ingrid le dice que por el momento preferiría mantenerse al margen de la magia, pero Joanna le dice que discutirán eso otro día, ya que hoy necesitaba de su magia para lanzar un hechizo alrededor de la casa. El hechizo fue un encantamiento protector, un embrujo que crea una barrera mágica alrededor de ellas y la casa para protegerlas del mal del cambiaformas.

En A Few Good Talismen, Joanna les cuenta a sus hijas una anécdota de una de sus vidas pasadas en el Salem de finales del siglo XVII, cuando un viejo amigo de la familia llamado Vidar les entregó a Ingrid y a Freya a los histéricos aldeanos de la villa después de que según él fueron imprudentes con sus poderes y casi exponen al resto. Con justa razón, Joanna se enfada y utiliza su magia en contra de Vidar frente a los cuerpos ardientes de sus hijas y pese a todo pronóstico, decide darle una dolorosa lección: en lugar de matarle, decidió cortarle una oreja. Al escuchar la historia, Ingrid y Freya se sorprendieron de lo que había hecho su madre, pero Joanna rápidamente les hizo saber que la moraleja de la historia era que había hecho lo correcto, en lugar de asesinar al hombre que tanto sufrimiento le había causado, optó por dejarlo vivir. Mientras le daba a sus hijas una lección de autocontrol, fue interrumpida por Wendy, quien mofó las enseñanzas de su hermana y en cambio le dio a sus sobrinas un consejo en cuanto al uso de la magia: usarla cuanto quieran, solo que sin herir a nadie.

En la biblioteca, Ingrid se encuentra con Barb y ambas se maravillan con la ecografía del bebé de Barb. Todo es halagos y risas hasta que Hudson las interrumpe y en su habitual imprudencia dice que el bebé parece una mancha. Su comentario es seguido por un breve silencio incómodo hasta que se marcha a acomodar unos libros, dejando a Ingrid y a Barb riéndose de su brutal honestidad. Entre las risas, Barb le hace saber a Ingrid que todo esto era posible gracias a su hechizo mágico, pero Ingrid, consciente de que debía ocultar su secreto le dijo que el hechizo que habían descargado de la internet no tenía nada que ver y que su embarazo había sido producto de su anhelo por ser madre y pensamientos positivos. Barb no le hace caso a la modestia de Ingrid y le dice que ella y su marido, Bob, quieren agradecerle haciéndola la madrina del bebé e Ingrid encantada acepta serlo.

Información Mágica

Maldición

"Las dos hemos vivido y muerto un montón de veces, pero no lo recordamos porque estamos malditas."

―Ingrid le habla de su maldición a Freya.

Ingrid recibe la marca del rey

Tras huir de Asgard al mundo de los mortales después de haber intentado derrocar a su abuelo, el rey, éste persiguió a su familia a este nuevo reino y allí les dio el castigo que consideró más cruel: las maldijo con una eternidad de sufrimiento y tragedias. A ella y a su hermana las condenó a tener vidas cortas, impidiéndoles envejecer más allá de los treinta años y renacer cada vez para repetir el doloroso ciclo de vida y muerte que su madre debía endurar.

Aunque la maldición de Ingrid es fácil de comprender, es un tanto compleja a la hora de explicar. Ella no sólo está maldita con la temprana muerte y reencarnación, su cuerpo y alma parecen estar ligados a su hermana, quién en caso de morir, no lo hace sola, ya que al poco tiempo, por lo general horas, la maldición cobra también la vida de Ingrid, o Freya, en caso de que Ingrid sea la primera en fallecer.

El estado actual de la maldición es incierto por muchas razones; para empezar, la maldición indica que Ingrid debe morir antes o al poco tiempo de cumplir los 30 años, y este fue el caso cuando ella fue asesinada por Tarkoff, pero al ser traída de vuelta a la vida por el propio rey, de alguna forma contradice la maldición inicial. Otra razón por la que no se sabe si la maldición aún está activa es por la muerte del rey, ya que al haber sido él el responsable de lanzarla, es muy probable que la maldición se haya roto cuando fue asesinado por su familia.

Poderes y Habilidades

"Sus poderes provienen de aquí; la fuerza mental. El intelecto. La invención. Verte escribir un conjuro fue como ver a Mozart componer un concierto."

―Wendy describe los dones de Ingrid.

Ingrid traza un pentagrama.

Ingrid Beauchamp es una poderosa bruja cuyos poderes mágicos permanecieron suprimidos la mayor parte de su vida debido a un hechizo lanzado por su madre para intentar prevenir su muerte temprana debido a la maldición. El hechizo mantuvo “atados” los poderes de Ingrid, pero nunca los removió de su ser, por esta razón es que ella podía hacer actos mágicos involuntarios y no notarlo.

La naturaleza mágica de Ingrid prevaleció siempre a pesar de su total incredulidad, parecido a su hermana, quien creía ser una psíquica y era talentosa en la creación de bebidas alcohólicas (prefigurando su don para ver el futuro y talento para crear pócimas), ella siempre estuvo de alguna forma atraída a la brujería y el esoterismo, tanto, que este fue el tema de su disertación. Este saber “mundano” le sirvió a Ingrid para adquirir un conocimiento bastante básico de la práctica, como términos, lenguaje (latín), reconocimiento de símbolos y cierta magia geométrica, con la que podía dibujar pentagramas y otras figuras para realizar hechizos.

Ingrid crea su primer hechizo.

Ingrid siempre ha sido una persona inteligente y no resultó extraño cuando su tía le reveló que sus poderes provienen del intelecto y la fuerza mental. En otras vidas, en las que tenía permitido usar la magia, ella explotó al máximo su potencial y creó numerosos hechizos ─de acuerdo con Wendy, el verla crear un hechizo era el equivalente mágico a ver a Mozart componer un concierto─, pero desafortunadamente, en esta vida ese no fue el caso, por lo que cuando intentó crear su primer hechizo, salió terriblemente mal ya que ella era prácticamente una novicia. Aunque su capacidad para crear nuevos conjuros estaba lejos de ser medianamente buena, su habilidad natural para lanzarlos es excepcional. Ella fue capaz de despertar sus poderes cuando lanzó un hechizo en latín para ayudar a su mejor amiga a quedar en embarazo, pudo traer a su tía de vuelta de entre los muertos a los pocos minutos de saber que era una bruja, y también pudo sacar por equivocación a un hombre de una pintura que se estaba prendiendo fuego al pensar que su hermana todavía estaba dentro.

Ingrid ayuda a Dash y Killian.

A medida que crecía cómoda en su nueva vida como bruja, Ingrid comenzó a desenvolverse y a lanzar encantamientos sin necesidad de instructivos (Grimorio) y valiéndose sólo de su habilidad para hablar y entender el latín; ella podía lanzar hechizos sanadores, de apertura para desbloquear cerraduras, de fractura para romper huesos e inmovilizadores para incapacitar y frenar a otra persona. Con el paso del tiempo, Ingrid sabía tanto de hechizos que podía instruir a otros en el lanzamiento de estos, las consecuencias que habrían de lanzar algunos e incluso pudo ayudar a revertir embrujos que habían salido mal, como cuando ayudó a los hermanos Gardiner a revertir el hechizo que estaba causando la muerte a Killian.

El lanzamiento de hechizos es sólo uno de los tantos poderes básicos que tiene Ingrid al ser una bruja. Ella tiene la habilidad de crear pociones mágicas con distintos efectos utilizando hierbas y mezclando polvos; Ingrid pudo modificar una receta mágica y la convirtió en un hechizo en forma de brownies y tras comerlos pudo recordar una de sus vidas pasadas en 1906. Una versión más potente y líquida de su hechizo fue creada por su hermana meses después para revivir más de una vida. Su conocimiento en brebajes pareció incrementar con el tiempo, y aunque ella nunca será capaz de prepararlos como su hermana, se ha mostrado como una ‘pocionera’ competente, tanto, que supo el antídoto idóneo para ralentizar el efecto del veneno que había tomado Killian para intentar romper la maldición que lo acechaba a él y a su amada alma gemela. Otra pócima posiblemente creada por Ingrid fue aquella que bebió antes de lanzar el hechizo de liberación que había creado.

Ingrid puede besar a Adam.

Preparar pociones y lanzar hechizos son actos mágicos que se realizan de manera consciente e intencional, mientras que hay otras habilidades que se encuentran siempre activas y en constante utilización, incluso si ella no se da cuenta o tiene intención de usarlas. Ejemplos de estas habilidades son su capacidad de ver, hablar e interactuar con espíritus de manera física, ─Ingrid pudo tocar y besar al fantasma de Adam después de haberlo invocado al plano terrenal─ incluso si ellos son sólo apariciones invisibles para el resto del mundo. Ingrid también ha exhibido cierta habilidad premonitoria sobre la cual no tiene control alguno; sus sueños le han insinuado eventos futuros, como cuando soñó que la persona que moriría por causa de su hechizo sería ella misma ─en el sueño su cuerpo se comenzaba a congelar, y más tarde, en la vida real, ella casi muere de igual manera después de que un hechizo saliera mal. Por desgracia, Ingrid no interpretó bien su sueño y por el contrario hizo todo aquello que la llevó a experimentar una situación similar a la soñada.

Ingrid vacía el lago con la mente.

Además de los poderes básicos de una bruja, Ingrid ha desarrollado varios poderes activos que son comunes entre su especie, como la telekinesis, la habilidad que permite manipular el movimiento de las cosas con la mente. Esta es la primera habilidad que ella utiliza intencionalmente de manera no verbal (sin ninguna clase de hechizo) y lo hace durante un entrenamiento mágico para mover una roca sumergida en el fondo de un lago, pero al ser inexperta con sus poderes, accidentalmente vació el centro del lago, haciendo volar en su dirección peces y de cuanta suciedad. Esa hazaña impresionó a su tía y dejó a Freya en vergüenza, ya que a diferencia de su hermana, ella simplemente hundió la roca que en un principio debían hacer flotar. Desde entonces, Ingrid ha sido capaz de utilizar este poder de forma más controlada, moviendo cosas de un lugar a otro, haciendo levitar objetos, e incluso impedir el movimiento de estos. Los poderes telequinéticos de Ingrid van mucho más allá de mover objetos con la mente, al igual que muchos en su familia, ella puede generar ondas de energía capaces de golpear con fuerza cualquier cosa que tengan enfrente, por lo general provocando un efecto más destructivo que con la telekinesis tradicional.

De todas las brujas en la serie, Ingrid es la que menos afinidad tiene con la Magia Elemental, pero esto no significa que no tengas tales poderes, ya que al ser una bruja tiene limitado control sobre el clima, y entre su amplia gama de habilidades individuales se encuentra la capacidad de conjurar fuego con el simple chasquido de los dedos, y en otras vidas se le ha visto controlar las plantas con la mente para hacerlas crecer en ambientes en los que de forma normal sería imposible.

Ingrid abre el portal a Asgard.

Ingrid Beauchamp no es una bruja ordinaria, y aunque se sabe que es más poderosa que otras y que carga con una poderosa maldición, hay algo más que la hace especial; ella es “La Llave,” la encarnación humana de la Serpens Clavem y la única persona capaz de abrir y cerrar los portales que llevan al otro mundo, Asgard. Como la llave, Ingrid posee cuatro habilidades arcanas de las cuales sólo se tiene conocimiento de una (abrir portales) y su propio hechizo, que al ser utilizado junto a las otras brujas de su clan (la daga, el puente, la viajera y la recolectora), puede destruir al rey Nikolaus, un brujo tan poderoso que sólo puede ser derrotado por las mujeres de su familia, las cuales él creía lo debilitaron al nacer.

Poderes Básicos

• Lanzamiento de Hechizos: Provocar cambios en la realidad mediante rituales o encantamientos, ya sean en español, latín o antiguo nórdico.
• Creación de Pociones: Preparar versiones líquidas de un hechizo utilizando hierbas, polvos y cualquier otro ingrediente necesario.
• Creación de Hechizos: Inventar encantamientos que no existen en ningún grimorio.
• Mediumnidad: Ver, sentir e interactuar con espíritus invocados en el mundo terrenal.
• Reencarnación: Volver a nacer después de haber muerto.

Poderes Activos

• Telekinesis: Manipular el movimiento de objetos o personas con la mente.
  • Emisión de Ondas: Generar energía telequinética capaz de golpear con fuerza todo aquello que tenga enfrente.
• Manipulación Elemental: Controlar varios aspectos de la naturaleza, en especial los elementos.
  • Pirokinesis: Conjurar y manipular el fuego.
  • Atmokinesis: Controlar el clima.
• Sanación: Curar cualquier herida física por medio de conjuros o de manera no verbal.
• Oniromancia: Tener sueños del futuro o al menos interpretaciones de eventos que están por suceder.
• Apertura de Portales: Abrir las puertas que separan los mundos.

Debilidades

• Muerte: Debido a su maldición, Ingrid está condenada a morir antes o poco después de cumplir los 30 años.
• Magia: Ingrid es susceptible a ataques mágicos y hechizos enemigos.
• Círculo de Contención: Un círculo hecho enteramente de polvo de ladrillo rojo y hierbas varias puede impedirle a Ingrid utilizar sus poderes e incluso salir de él.
• Ramus Mortium: Si entra en contacto con esto y no recibe la poción adecuada a tiempo, sus pulmones se llenarían de una sustancia plateada conocida como Argentium, causándole una muerte lenta y dolorosa.
• Talismán de Energía: Un muñeco hecho de su cabello le puede impedir utilizar sus poderes.
• Draco Sanguinem: El veneno de la Mandrágora puede afectar su mente, haciéndola perder el libre albedrío y dejándola bajo el control de este demonio sexual.

Pertenencias

• Grimorio Beauchamp: Antiguo libro repleto de hechizos e instructivos mágicos.
• Diario: Libreta en la que Ingrid anota los hechizos que inventa o modifica.

Etimología

• Ingrid es un nombre de pila femenino originario de los países germánicos. Es la forma anglosajona de Ingiríðr, que era la forma corta de Ingfríðr, compuesto por el teónimo Ing (diosa nórdica de la fertilidad) y fríðr, que significa “amada, bella”.

• Beauchamp es un nombre común inglés de origen normando. Es una composición de las palabras francesas “Beau”, que significa “guapo, lindo, atractivo” y “Champ”, que significa “campo”.

Galería

Notas y Curiosidades

• La facilidad de Ingrid para ayudar a las mujeres a consebir puede ser una referencia al origen etimológico de su nombre: Ing, una diosa menor de la fertilidad en la mitología nórdica.